¡Ya estamos en época de campamentos de verano! ¿A quién no le ha pasado alguna vez ir de campamento y volver con piojos? Es frecuente que los niños se vayan a pasar unos días fuera y regresen con estos animalitos: compartir habitación, juegos, ropa, gorras… Hoy en nuestro post os damos las claves para prevenirlos. ¡Empezamos!

1. Revisa el cabello

El primer paso para evitar los temidos piojos pasa por una buena prevención. Revisa el cabello de todos los miembros de la familia para detectar un posible contagio, y hazlo cada dos días aproximadamente.

2. El cabello, mejor corto o recogido

No es un remedio válido al 100%, pero especialmente para los campamentos o espacios en los que los niños pasan más tiempo juntos, a los piojos les costará más pasar de una cabeza a otra si no encuentran cabello sobre los que subirse.

3. La lendrera, a diario

Cambia tu peine habitual por la lendrera. No te costará ningún trabajo extra, y hay ocasiones en las que los huevos puede que permanezcan desapercibidos para nuestra vista, pero no para la vista.

4. Evita compartir gorras

Habla con tu hijo y recuérdale la importancia de no compartir gorras y otras prendas que están en contacto con el pelo. Aunque no es frecuente que los piojos abandonen el pelo, si el grado de infestación es alto, podemos encontrarlos en sombreros, gorras, toallas…

5. Lava con agua muy caliente

Como hemos comentado en el punto anterior, podemos encontrar piojos en la ropa. Por eso, usa agua muy caliente para lavar sábanas y toallas.

6. Usa repelente

Si tu hijo se marcha de campamento, introduce unos días antes en su rutina diaria el repelente antes del cepillado. Si lo toman como un hábito, será más difícil que lo olviden. Además, cambia su champú habitual por uno de árbol de té.

Con estas pautas, esperamos ayudaros a prevenir los piojos. Y recuerda, si encuentras algún habitante nuevo, consigue un buen tratamiento antipiojos y liendres, ¡y mucha paciencia!